MÉTODO SINTOTÉRMICO, UN CAMINO DE VUELTA AL CUERPO.

A diario recibo preguntas relacionadas con el método sintotérmico: ¿qué es?, ¿para qué sirve?, ¿puedo usarlo si tengo ciclos “irregulares” o si estoy dando el pecho?

La respuesta es sencilla: el método sintotérmico vale para toda persona menstruante siempre y cuando no esté con anticonceptivos hormonales, ya que en ese caso, de hecho, no sería una persona menstruante.

Ahora bien, ¿qué es exactamente el método sintotérmico? 

Se trata de un método de reconocimiento de la fertilidad que nos permite saber en cada momento lo que está pasando en nuestro cuerpo de una manera muy precisa. Es por eso que puedes elegir usarlo como método anticonceptivo, con una eficacia del 99,6% (superior a la de la píldora anticonceptiva), como método para la búsqueda de embarazo o para conectar con tu cuerpo, conocerlo en profundidad y saber si estás teniendo unos ciclos sano, o por el contrario hay cosas por mejorar.

Las herramientas que se usan para este método son súper sencillas:

– Termómetro de temperatura basal (aquel que tiene dos decimales, no nos vale cualquiera).
– Moco cervical: el que produce nuestro cérvix a lo largo del ciclo y que va variando en consistencia, humedad y elasticidad.
– Posición del cérvix: este último biomarcador realmente es opcional, sin embargo está bien conocer las distintas posiciones que toma nuestro cuello uterino a lo largo del ciclo. ¡Es un signo de autocoñocimiento más!

Utilizando estos tres biomarcadores podremos determinar: la duración de nuestros ciclos, los días que dura nuestra fase fértil, cuándo se produce nuestra ovulación con una precisión abrumadora, y los días exactos en los que podremos tener relaciones con penetración sin que haya riesgo de embarazo. (Cabe recalcar que aunque no haya riesgo de embarazo, el método sintotérmico no protege con ITS, para ello debemos usar siempre condón).

También nos ayuda a identificar cuando las cosas no van del todo bien:

– Nos refleja si la duración y características de nuestra fase lútea (también conocida como premenstrual), son sanas.
– Si estamos teniendo ciclos ovulatorios o nos está costando ovular.
– Nos puede revelar posibles problemas de tiroides, como hipotoroidismo.
– También podemos saber si nuestros estrógenos y progesterona están equilibrados y nuestros ovarios respondiendo bien.

¡Y todo esto lo tenemos al alcance de la mano! Solo observándonos y prestando atención a las señales que a diario nos manda nuestro cuerpo, si nuestros ciclos están siendo sanos o no. Además de regalo te llevas la posibilidad de usarlo como método anticonceptivo sin tener que utilizar ni un solo químico en tu cuerpo. ¡Es que es la caña se mire por donde se mire!